MIENTRAS IMPULSA LA LEY DE HIDROCARBUROS, PARA SUBSIDIAR A LAS PETROLERAS EL GOBIERNO NO QUIERE PONE FECHA A LAS NUEVAS FORMAS DE MOVILIDAD

El secretario de Energía, Darío Martínez, afirmó días atrás, que la "transición energética tiene que ser en función de la velocidad que pueda la industria nacional" al acompañar el lanzamiento de la Tecnicatura en Energía Renovable que llevará adelante la Cooperativa Calf en conjunto con la Fundación Cristiana del Oeste en la provincia de Neuquén.

Las contradicciones en materia de políticas energéticas continúan mostrándose por parte del Secretario del área, Darío Martínez quien prefiere seguir demorando los plazos que en el resto del mundo se pusieron para el reemplazo de los vehículos de combustión fósil por nuevos combustibles limpios.


De la misma forma, la industria del GNC en Argentina, que debería ser el vector de transición de la matriz energética, sigue esperando la aprobación de normativas necesarias para fomentar el crecimiento de los vehículos pesados a gas.

De la misma manera. las estaciones de servicio que constituyen la red de recarga vehicular más desarrollada y mejor distribuída de la Región, sigue reclamando sin éxito, por ser tenidas en cuenta dentro de los debates con petroleras y demás referentes a la hora de implementar políticas de precios y tributarias.

La inacción queda en evidencia, una vez más con las declaraciones del titular de la cartea energética quien habló de que "la renovación de la matriz depende de la velocidad que se le pueda dar en Argentina".

Mientras lanzaba la carrera de Tecnicatura en Energía renovable, sin embargo, no daba las esperanzas de utilizarla en un futuro inmediato, ya que su discurso se basó en que Martínez "la transición energética tiene que ser en función de la velocidad que pueda la industria nacional y para eso hay que formar técnicos y profesionales que son un verdadero ejemplo de la cooperativa”.

En este sentido, señaló que “cualquier desarrollo energético tiene que ir acompañado de la industria nacional que vaya creciendo en esa cadena de valor y la industria nacional tiene que tener los profesionales, los técnicos, preparados y capacitados para llevarlo adelante”.

Es decir, que se crea una carrera terciaria para formar profesionales, pero en lugar de alentarlos a estudiarla se les aclara que "hay que esperar pero no sabemos hasta cuando".

Esto queda evidenciado con la insistencia del gobierno por el nuevo régimen de fomento a las inversiones petroleras, que insiste en subsidios a una industria que en el resto del planeta está reinventándose para no desaparecer.

Finalmente, queda como un recuerdo de palabras lindas, el anuncio del Presiente de la nación en su discurso del año pasado cuando prometía una ley de electromovilidad, pero insiste en mantener el estatus quo dentro de la industria minera, para que el litio, en lugar de crear valor agregado en Argentina, siga imitando la teoría extractivista de la ganadería y la agricultura, donde las potencia se llevan el recurso a bajo precio, mientras en Argentina, hay que importar baterías de China fabricadas con el litio argentino.

Perón hablaba de independencia económica, soberanía política y justicia social.... algo que en materia energética cuando el General Mosconi pensaba el futuro, no contaba con este tipo de funcionarios.